El futuro de las especialidades odontológicas (y, en muchos aspectos, ya el presente) pasa por la implementación de nuevas tecnologías informatizadas que nos ayudan en las diferentes fases de los tratamientos clínicos.
En el caso concreto de la ortodoncia, la digitalización de los tratamientos permite que desde el principio podamos utilizar métodos computerizados, incluyendo mejoras en el diagnóstico, plan de tratamiento, fase terapéutica (creación y colocación de aparatos), y finalización y evaluación de la estabilidad conseguida.
En la fase de diagnóstico disponemos de programas para la valoración de radiografías y cefalometría, teletermografías, y también el análisis de la tomografía axial CBCT para obtener información tridimensional, especialmente útil en casos como caninos incluidos, localización de terceros molares retenidos, o para valorar el grosor del hueso en relación con determinados movimientos dentarios.


El plan de tratamiento se beneficia, gracias a la digitalización, de valoraciones de los diferentes movimientos dentarios tras utilizar el escaner intraoral; impresoras 3D e implementación del tratamiento, además de herramientas como el Digital Smile Design (DSD). También podemos utilizar guías para cementar de forma indirecta los brackets , en casos que sea necesario. Además, existen programas de ordenador para diseñar y construir los diferentes aparatos que se utilizan.



Al finalizar, la tecnología CAD CAM nos permite hacer retenedores de alambre perfectamente adaptados a la superficie de los dientes.
